En la Disciplina Positiva, los errores son vistos como oportunidades de aprendizaje.
En lugar de castigar a nuestros hijos cuando cometen un error, podemos utilizar esta situación como una oportunidad para enseñarles habilidades sociales y emocionales valiosas.
A continuación, te explicaré cómo puedes utilizar la técnica de las 3’R para abordar los errores desde la Disciplina Positiva.
Reconocimiento: “Vaya, he cometido un error”
El primer paso para abordar un error desde la Disciplina Positiva es reconocer que se ha cometido uno. Esto no solo ayuda a nuestros hijos a asumir la responsabilidad de sus acciones, sino que también les enseña a ser honestos y a tener integridad. Al reconocer los errores, nuestros hijos aprenden que está bien equivocarse y que es importante tomar medidas para enmendar cualquier error que hayan cometido.
Reconciliación: “Lo siento mucho”
El segundo paso es la reconciliación. Es importante que nuestros hijos se disculpen cuando han cometido un error, y que lo hagan de manera sincera. Esto no solo ayuda a restaurar la confianza y la relación con los demás, sino que también les enseña a nuestros hijos a ser empáticos y a considerar los sentimientos de los demás.
Resolución: “Pensemos juntos una solución”
El tercer y último paso es la resolución. En lugar de simplemente castigar a nuestros hijos por haber cometido un error, podemos utilizar esta situación como una oportunidad para enseñarles habilidades valiosas de resolución de problemas. Juntos, podemos trabajar para encontrar una solución que sea satisfactoria para todas las partes involucradas.
Esto no solo ayuda a nuestros hijos a desarrollar habilidades sociales y emocionales importantes, sino que también les enseña que los errores pueden convertirse en oportunidades de crecimiento y aprendizaje.
En conclusión, en lugar de ver los errores como algo negativo, en la Disciplina Positiva los vemos como oportunidades de aprendizaje.
Utilizando la técnica de las 3’R, podemos ayudar a nuestros hijos a asumir la responsabilidad de sus acciones, a ser honestos, empáticos y a desarrollar habilidades importantes de resolución de problemas.
¿Qué opinas de esta técnica? ¿La has utilizado en tu hogar?
¡Comparte tu experiencia en los comentarios!
Un abrazo,
Sandra Martínez Aguiló – facilitadora de Disciplina Positiva